EL CAMINO DE LA VIDA

EL CAMINO DE LA VIDA
EL CAMINO DE LA VIDA. - Every day you may make progress. Every step may be fruitful. Yet there will stretch out before you an ever-lengthening, ever-ascending, ever-improving path. You know you will never get to the end of the journey. But this, so far from discouraging, only adds to the joy and glory of the climb. - Sir Winston Churchill.

jueves, 20 de enero de 2011

Almuerzo cultural: El mundo de Mafalda

Estimados amigos,

¿Cómo podría faltar Mafalda en alguno de nuestros almuerzos culturales?; y, especialmente, ¿cómo podría faltar en nuestras sesiones, aunque el video no sea su medio más propio, el arte de su extraordinario creador, el argentino Joaquín Salvador Lavado (1932-), mejor conocido como Quino

Importancia.

Aunque se produjo en el lapso de apenas diez años, de 1964 a 1973, Mafalda nos ha acompañado por años y años, en libros, revistas y periódicos.  Siempre fresca, aguda, vigente y, por supuesto, latinoamericana, Mafalda no es solo muy querida para nosotros, sino que forma parte de nuestra realidad más cercana, pues su mundo refleja de muchos modos lo que vivimos, día a día, en este curiosa región del mundo en la que habitamos.


Es tal la importancia del personaje, que grandes personalidades han  expresado su respeto por ella:

·         Julio Cortázar (1914-1984):

No tiene importancia lo que yo pienso de Mafalda. Lo importante es lo que Mafalda piensa de mí.

·         Umberto Eco (1932-):

Puesto que nuestros hijos se preparan para ser, por elección nuestra, una multitud de Mafaldas, no será imprudente tratar a Mafalda con el respeto que merece un personaje real.

·         Gabriel García Márquez (1927-):

Después de leer a Mafalda me di cuenta de que lo que te aproxima más a la felicidad es la quinoterapia.

Como sabemos, Mafalda es hija de la Guerra Fría.  Vive y crece (aunque en realidad apenas si creció algo durante esos diez años) en medio de una sociedad que respira tensión política e ideológica y que ha demostrado ser capaz de la mayor represión.  En ese contexto, la niña vive preocupada por el mundo que le ha tocado habitar, y lo expresa con toda constancia.  Su pensamiento tiende hacia a la izquierda (al menos desde la óptica prevaleciente), lo que la torna en ocasiones “subversiva”.  Los temas recurrentes en su vida son el destino de la humanidad, la paz mundial y, por supuesto, su consabido desagrado por la sopa.  Su actitud es de inconformidad frente al mundo de sus mayores: un mundo que demostró toda su brutalidad en los años subsiguientes, con la dictadura militar argentina.

Mafalda no es una niña como otra cualquiera.  Humilde y comprometida con las etnias, le preocupa el mundo y no entiende como los adultos pueden llevarlo tan mal.  Es famosa en el mundo entero por la gracia de sus preguntas, la inocencia de su mundo y la altura de sus ideales.  Luchadora social incansable, emite manifiestos políticos desde su sillita con una inocente falta de inocencia.  Puede decirse que es una revolucionaria más allá del lápiz y el papel.  A través de Mafalda y su entorno, su autor, Quino (Joaquín Salvador Lavado), reflexiona sobre la situación del mundo y las personas que en él vivimos.

Mensaje.

Las frases de Mafalda son por lo general contundentes.  Con ellas Quino nos prueba que, además de un gran dibujante, es también un maestro del mensaje.  La lista es apabullante:
  • Y al final, ¿cómo es la cosa? ¿Uno lleva la vida por delante o la vida se lo lleva por delante a uno?
  • ¡Sonamos, muchachos! ¡Resulta que si uno no se apura a cambiar el mundo, después es el mundo el que lo cambia a uno!
  • ¿Por dónde hay que empujar este país para llevarlo adelante?
  • ¿No será acaso que esta vida moderna está teniendo más de moderna que de vida?
  • ¿Y si en vez de planear tanto voláramos un poco más alto?
  • Dicen que el hombre es un animal de costumbres; más bien, de costumbre el hombre es un animal.
  • Como siempre: lo urgente no deja tiempo para lo importante.
  • ¿No sería más progresista preguntar dónde vamos a seguir, en vez de dónde vamos a parar?
  • Una cosa es un país “independiente” y otra un país “in the pendiente”.
  • ¡Paren al mundo! ¡Me quiero bajar!
  • [Leyendo un libro:] Debes seguir siempre la senda de bien. Lógico... ¡Con el embotellamiento que debe haber en la autopista del mal!
  • La vida es linda, lo malo es que muchos confunden “lindo” con “fácil”.
  • [Mientras reza:] "Está bien que nos hayas hecho de barro, pero ¿por qué no nos sacás un poquito del pantano?
  • Nunca falta alguien que sobra.
  • [Mostrando un globo terráqueo a un oso de peluche] Mirá, esto es el mundo, ¿ves? ¿Sabés por qué es lindo este mundo? ¿Eh? Porque es una maqueta…, el original es un desastre.
En resumen, Mafalda es un personaje muy especial.  Es, como han dicho algunos autores, "espejo de la clase media latinoamericana y de la juventud progresista".  Por ello, no obstante su origen y sin llegar al panfleto, su personaje pudo dar vida a la tira cómica, de corte político, más exitosa del mundo, con traducciones a más de treinta idiomas y prólogos a sus ediciones internacionales por autores de la talla de Eco, entre otros.

Personajes.

Como niña citadina, Mafalda tiene familia y amigos con quienes se relaciona día a día en su comunidad y, en ese contexto, desarrolla su visión del mundo.  Por su edad, va a la escuela y, en el verano –si hay dinero en la casa– sale de vacaciones con su familia.

Todos conocemos a los personajes de la serie; sin embargo, quizá debamos refrescarlos.  El siguiente es el recuento hecho de diversas fuentes sobre esos personajes, hecho en el orden en el que aparecieron en la serie:
  • Mafalda:
Aparece por primera vez el 29 de septiembre de 1964.

Mafalda es una niña curiosa, inquieta y terriblemente irónica, nacida de una típica familia porteña (Buenos Aires).  En un cuerpo de niña despunta la rebeldía juvenil marcada por el progresismo.   Es contestataria, con una cabeza abierta y propensa a filosofar a partir de cualquier hecho cotidiano.  Se trata de una niña que sabe qué es lo que busca, y que, al mismo tiempo, es una gran pesimista sobre la situación del mundo.

Al comenzar la historieta Mafalda tiene seis años y, para marzo siguiente, entra al kindergarten. Representa la aspiración idealista y utópica a hacer de éste un mundo mejor aunque ciertamente la envuelve el pesimismo y la preocupación, casi todo el tiempo, debido a las circunstancias políticas y sociales imperantes, más en la escena mundial que en su propio país.

Los comentarios y ocurrencias de Mafalda son el reflejo de las inquietudes sociales y políticas en el mundo de los años sesenta y setenta de Latinoamérica.  A Mafalda le gustan los Beatles y El pájaro loco. Le gusta también jugar en el parque a los vaqueros con sus amigos. 

Su comida preferida son los panqueques, que le gustan tanto que es capaz de comer un poco de sopa —plato que verdaderamente odia— para poder comer este postre favorito.

En los diez años de la historieta aparentemente llega hasta el tercer o cuarto grado. Le gustaría estudiar idiomas y trabajar de intérprete en las Naciones Unidas para contribuir a la paz mundial.  Está convencida del progreso social de la mujer y lo preconiza a ultranza, algo adelantado a su época.

Nació el 15 de marzo de 1962, según confiesa el mismo Quino, aunque también se suele celebrar su cumpleaños el día en que apareció publicada por primera vez; esto es, el 29 de septiembre de 1964.
  • El papá:

Aparece por primera vez el 29 de septiembre de 1964.

Es el típico empleado de oficina en una ciudad grande: un hombre sano, bueno y un tanto gris, que trabaja en una compañía de seguros privada (en la era previa a las computadoras). Ahorra por necesidad y se la pasa haciendo cuentas para llegar a fin de mes, por lo que procura en todo momento la mayor mesura en el gasto familiar. 

No comprende bien los avances y retos que plantean las nuevas generaciones y, mucho
 menos, las preocupaciones de Mafalda.  Las dudas que le plantea su hija con respecto a los males del mundo lo dejan en vilo la mayor parte de las veces, de allí que haya desarrollado cierta adicción al Nervocalm

Tiene entre 35 y 40 años.  No se revela su nombre ni su apellido en toda la serie.  Su afición son las plantas de interior, ya que su familia habita un pequeño apartamento sin áreas verdes.  Cuando aparecieron hormigas en su casa, describió el hecho –para escándalo de Mafalda– como "la peor desgracia en el mundo".

Conduce un auto familiar que es un Citroën 2CV, típico automóvil para la clase media de su país. 
  • La mamá:
Aparece por primera vez el 6 de octubre de 1964.

Es una típica ama de casa argentina de clase media de finales de los años sesenta, principios de los setentas, preocupada hasta la histeria por lo que pasa dentro de su microclima hogareño.  En alguna tira se revela que se llama Raquel.  Cocina, lava, plancha, hace las compras y (aparentemente) no maneja el auto.

Fue a la universidad pero abandonó la carrera y, con ello, la perspectiva de ser pianista profesional porque se casó, hecho que Mafalda siempre le recrimina.  Sin embargo, no requiere complicaciones para ser feliz y da algunas lecciones de humildad y sacrificio a su pequeña hija, siempre inquieta por las adversidades del mundo.
Como el padre, la madre es esencialmente pasiva y algo fracasada.  Padece el dilema diario de pensar qué va a hacer de comer para su familia.  Ya pasó de los 30 años, porque Mafalda la descubre alguna vez arrancándose una cana.
  • Felipe:
Aparece por primera vez el 19 de enero de 1965.

Es un niño muy imaginativo y buen amigo de Mafalda y los demás niños.  Va un curso más arriba que ellos y sin embargo su personalidad es más simple e ingenua que la de sus amigos. Soñador, tímido, perezoso y despistado, vive eternamente agobiado por sus tareas escolares y su dificultad para mantener la atención en ellas. 

Ve la vida de manera más sencilla que Mafalda, más como el buen niño que es.  De hecho, Felipe es el mejor amigo de Mafalda y sería su compañero ideal, ya que ambos se complementan. Toda la seguridad que tiene Mafalda es algo de lo que carece Felipe.

Imaginativo, mal estudiante y con muy poca fuerza de voluntad, Felipe es uno de los personajes que más se hace querer, incluso por el propio Quino, quien lo presenta como el personaje más afín a él mismo.  Le gusta leer tiras cómicas de El llanero solitario, oír a los Beatles, jugar al ajedrez y muestra interés por una niña llamada Muriel que aparentemente nunca se da cuenta de que él la está mirando; tampoco es capaz de percibir la simpatía que le profesa Susanita o cuando se da cuenta de ella la rechaza abiertamente.

Vive en el mismo edificio que Mafalda y su familia (Felipe en el 5º, Mafalda en el 2º).  Quino se inspiró en Jorge Timossi, un amigo de él, de quien Quino hizo heredar a Felipe dos graciosos dientes de conejito.
  • Manolito:
Manuel (Manolito) Goreiro es un amigo de Mafalda y los otros niños.  Es hijo de un comerciante de barrio (de origen español) que es el propietario del Almacén Don Manolo.

Representa las ideas capitalistas y conservadoras dentro de la historieta, además de ser la caricaturización del inmigrante gallego, a quien los locales ven como brutos y bastante cuadrados.  Aunque es ambicioso y materialista, en el fondo es un niño bueno con un gran corazón y una clara necesidad de afecto. 

Además de acudir a la escuela, cuestión para él secundaria, ayuda a la venta y distribución de mercancías en el almacén de su padre y le interesa estar al tanto de todas las operaciones de entrada y salida de dinero que en él se generen. 

Es el más ignorante del grupo, sin embargo, de los más divertidos de la historieta, caracterizado según la idea de "gallego" de los chistes, con personajes simples y tontos aunque siempre con los pies en la tierra.  Tiene una ausencia completa de imaginación que lo hace contrastar con Felipe (excepto para soñar en todo el dinero que ganará cuando sea grande); sin embargo, es capaz de ver cualquier oportunidad financiera y de negocios que se le presente, al grado de venderles a sus amigos dulces a crédito con intereses que anota en su libretita u oler una moneda tirada a distancia, si es del caso.

Físicamente, lleva el pelo cortado a cepillo y tiene la cabeza más cuadrada que los demás. Salvo por el vello facial, es idéntico a su padre y a su hermano mayor; éste aparece en la tira una sola vez cuando lo licencian del servicio militar y trabaja en el almacén de su padre; después Manolito cuenta que emigró a Estados Unidos. Una de sus características que más llama a atención es que a este personaje le agradaba la inflación que azotaba al país en aquella época para subir los precios de su almacén. A diferencia del resto de los personajes, a Manolito le gusta la sopa, odia a los Beatles y toda la moda de los años sesenta tanto como a la competencia del Almacén Don Manolo (los otros almacenes). Su mayor sueño es tener una cadena de supermercados (Manolo's) y hacer fundir a los propios Rockefeller. 
  • Susanita:
Aparece por primera vez el 6 de junio de 1965.

Según el libro “Viva Mafalda”, se llama Susana Beatriz, aunque en una tira aparece como Susana Clotilde Chirusi y en “Mafalda Inédita” aparece como Susana Beatriz Chirusi.  Es amiga de Mafalda y ambas fueron las únicas féminas del grupo hasta la llegada de Libertad.

Es el personaje de mayor expresión de la serie: parlanchina, pendenciera, chismosa, egoísta y crítica de lo que sea distinto a ella (nada de lo que pasa en su vecindario ocurre sin que ella se entere).  Es, además, discriminativa y en ocasiones altanera.  Su presencia llega en ocasiones a ser agobiante para el resto del grupo al grado de enfermar a los demás, aunque ella no lo percibe. 

Como dice un autor, como personaje Susanita representa, junto a Manolito, la parte de la naturaleza humana que menos queremos admitir en nosotros mismos.  Se lleva mal con Mafalda.  A pesar de ello tiene su corazoncito, aunque no lo muestre con frecuencia.

Preocupada por la imagen y la moda más que el resto del grupo, su máxima aspiración es ser madre de la clase acomodada, tener muchos hijos y reunirse a jugar al bridge con sus amigas para presumir de su marido, asumiendo el rol clásicamente asociado a la mujer doméstica de cierta clase social.  Como ella dice en clase, el futuro perfecto del verbo “amar” es “hijitos”, lo que contrasta fuertemente con la actitud de Mafalda, quien defiende de muchos modos la liberación de la mujer y la igualdad entre los sexos.

Físicamente, Susanita es rubia y tiene bucles (tirabuzones), lo que le da un aspecto similar al de su madre. Es racista, despectiva de los pobres y admiradora de la oligarquía. El simple hecho de pensar en Manolito la enferma, por lo bruto que es.

Sus pasatiempos favoritos son jugar de casita con Mafalda y representar situaciones propias de los mayores, así como pelearse con Manolito cada dos por tres, como dijo Mafalda en su segunda historieta, aunque muestra cierto interés romántico en Felipe (el cual no le corresponde).
  • Miguelito:
Aparece por primera vez en el verano de 1966.

Miguel (Miguelito) Pitti es un amigo de Mafalda, más pequeño e inocente que el resto de la pandilla, y también más egocéntrico.  Enérgico, histérico, depresivo y contundente, es más soñador que Felipe y tiene un carácter filosófico más profundo que el de la propia Mafalda, haciéndose preguntas más complejas sobre aspectos alejados de la realidad.

Su pelo recuerda a las hojas de una lechuga y siempre viste un peto con tiradores.  Presenta una complejidad emocional y una personalidad más elaborada que el resto.  No tiene término medio.  Su inocencia le permite reflexionar acerca de todo, desde las cuestiones de menor sentido o importancia a las más alambicadas (por ejemplo, un día dice: ¿Cómo se las ingeniará el tiempo para doblar las esquinas de los relojes cuadrados?)  Quino cuenta que como Miguelito– él también es propenso a “hacerse preguntas que no sirven para nada”.

Es hijo único y sus discusiones con su madre siempre están presentes en las historietas. Es algo egoísta y un enfervorecido defensor de Benito Mussolini, pues así se lo ha inculcado su abuelo.  Estas características le hacen ser directo y sincero con las personas, pudiendo llegar a parecer cruel en algunos momentos pero aceptando con humildad y sin acritud las críticas recibidas.

Detesta tener la edad que tiene y pasar desapercibido, pues se siente el justo centro del mundo, sin que haya quien le haga pensar lo contrario.  Tal vez por ello, resiente ser regañado por su madre, quien es una fanática del orden y la limpieza y, por ello, resulta un poco “anti-niños”. 
  • Guille:
Aparece por primera vez el 2 de junio de 1968.

Es el hermano pequeño de Mafalda y el único personaje que crece físicamente a lo largo de la tira.  A pesar de su inocencia, puede hacer gala de mal carácter, como cuando insultó a un chofer imprudente, para enorme congoja de su padre, o incluso de deseo, como cuando admitió que le gustaba Brigitte Bardot.  Protagoniza de continuo las típicas travesuras y desperfectos domésticos de los niños de primera infancia, situaciones que divierten en grado sumo a los lectores de la tira.

Cuando apareció en escena Susanita no podía disimular la envidia que tenía de Mafalda y no sabía cómo era posible que sus padres se hubieran dejado ganar por los de Mafalda con u hermanito. 

Guille representa el enfrentamiento generacional, ya no entre padres e hijos, sino entre generaciones separadas de hermanos, aunque sea por unos poquitos años.  Guille llegó con su ingenuidad a hacer a Mafalda algunas de las preguntas que ésta había hecho antes a sus padres, solo que desde la óptica de dos niños que conversan seriamente sobre esos temas.

En general, no obstante los temas, Guille se caracteriza por hablar con un lenguaje infantil (por ejemplo, en una tira Mafalda trata de corregirlo para que diga «tortuga» y no «todtuga»).  Como su hermana, tiende a ser algo irreverente, pero en otro sentido (llama a sus padres “los viejos”); también le llama al cuarto de sus padres la “sección de usados” y, aunque gusta de la sopa, odia la mortadela. 

Usa chupeta, excepto en las últimas tiras.  La madre estaba embarazada de él cuando se produjo el golpe de estado en Argentina del general Juan Carlos Onganía en 1966.  El periódico donde se publicaba la tira (El Mundo) cerró antes de que naciera, y no hay descripciones sobre las incidencias del parto.
  • Libertad:
Aparece por primera vez el 15 de febrero de 1970.

En una interesante metáfora entre el nombre de este personaje y el dibujo que la representa, ya que es menuda y de muy poca estatura, al punto que incluso Guille es más alto que ella.  Sin embargo, peso a su poco peso corporal, es la menos niña de todos y su personalidad es cuando menos incendiaria, ya que proyecta sus ideas políticas en contra del sistema establecido de manera abierta y sin contemplaciones.

Es la única del grupo que compite en liberalidad con Mafalda, en contraste con los más conservadores Manolito y Susanita y los mucho más livianos Felipe y Miguelito.  Aspira a que el pueblo tome conciencia de la situación de su país, se levante en una revolución social y cambie las estructuras del país.

La han llamado una especie de “Mafalda en frasco chico”, pero su beligerancia de izquierda no admite comparación real.  Como los ideólogos de ese cariz, se pone nerviosa ante la gente complicada, que no ven su realidad.

Su madre es traductora de francés y su padre es socialista y trabaja en un “puestucho de morondanga”, como ella misma lo describe.  Libertad aspira a ser traductora de francés al igual que su madre, pero, a decir verdad, sus ideales parecen mucho más altos.  Es el personaje con quien Mafalda más conversa en materia de política y sociedad.  Se hacen amigas rápidamente y, pese a que Mafalda es más realista y Libertad más idealista (¡!), no suelen tener discusiones, contrario a lo que sucede con Mafalda y Susanita.

*   *   *   *   *

El impacto de estos personajes ha sido revelador.  En 1976, Quino utilizó a Mafalda y sus amigos para diseñar por encargo un afiche que ilustra los principios de la Declaración de los Derechos del Niño.  Pocas cosas, probablemente, más apropiadas que este motivo.

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Aunque el video que se presentará no es de calidad óptima, su realización es suficiente para meternos de lleno en el mundo de Mafalda: un mundo muy nuestro, según lo indicado.

Los esperamos.

Saludos,

Carlos.

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